“RECORRIENDO LA WEB”

Nuevas Tendencias

Si hacemos un recorrido rápido por las calles de Río Gallegos y en plena jornada laboral, es fácil comprobar con nuestros propios ojos las nuevas tendencias: Las mujeres eligen ropa cada vez más informal o demasiado sexy para ir a trabajar. Ya sea mediante escotes, polleras cortas o jeans ajustados, la consigna siempre es la misma: mucha piel al descubierto. Tanto en los ámbitos de la administración pública o en el comercio, las profesionales y empleadas de hoy, tienden a optar por prendas más informales y cómodas, que casi no hay diferencia entre lo que se usa para trabajar y el vestuario del fin de semana. El típico traje azul o negro de los años ´80 o ´90 ya no se usa más.

La imagen de hoy es más femenina y las opciones son mucho más osadas que años anteriores. Una explicación de esta tendencia tiene que ver con la desorientación. Por un lado, como los códigos de vestimenta suelen estar implícitos, las reglas muchas veces son poco claras y dan lugar a muchas interpretaciones.Esto se debe a que no todas entienden el concepto de informalidad de la misma manera. Vestirse demasiado sexy o informal puede parecer audaz y liberador para algunas, pero sigue siendo mal visto por otras, y aunque cueste admitirlo, en estos tiempos que corren, la fórmula mujer tradicional equivale a mujer inteligente. Este concepto sigue tan instalado como hace décadas atrás. ¿Pero que debemos hacer para no caer en estas tendencias?

Hay una cuestión que hay que tener en cuenta a la hora de ir a trabajar: La clave está en el equilibrio y en recordar que la primera impresión es lo que cuenta, no debemos olvidarnos que la imagen que se muestra es la que una desea transmitir a los demás. Esta consiga también debe complementarse con técnicas para el uso del maquillaje durante el día y la noche.

No hay duda que la forma en la que vestimos dice mucho de nuestra imagen personal, por lo tanto, el punto clave está en poner límites para no caer en excentricidades. Considerar que aquello en lo que uno cree es lo que se quiere proyectar y se quiere lograr a la hora de ir por un estilo. Sin dudas, este será el sello que marque nuestra personalidad y la correcta elección de prendas combinables para cada tipo de ocasión.